Queridas hermanas:

En esta solemnidad, en la cual los Reyes Magos nos invitan a ponernos en camino, al descubrimiento del Rostro amable y misericordioso de nuestro Maestro, me dirijo a ustedes para comunicarles oficialmente que el próximo Inter-capítulo se celebrará en Roma en la Casa San Pablo, del 5 al 20 de septiembre de 2016.

Como ciertamente recordarán, la Asamblea inter-capitular es convocada después de aproximadamente tres años del Capítulo general (cf. Const. 176), con el objetivo de:

• verificar la asunción de las orientaciones surgidas en el último Capítulo general;
• tratar argumentos importantes y urgentes;
• centrar la programación del próximo trienio, identificando eventuales prioridades de camino.

Participarán, además de las hermanas del gobierno general, las superioras provinciales y de delegación y las superioras de las casas dependientes.

Las hermanas de la Comisión preparatoria^[1], ya se han encontrado en Casa generalicia, en los días 12-19 de diciembre, para puntualizar el tema, identificar modalidades de  involucración de la Congregación con respecto a la verificación del proyecto capitular, preparar el esbozo del programa de las jornadas y sugerir la metodología que acompañará el desenvolvimiento de los trabajos.

La Comisión, además, elaborará un subsidio para favorecer la involucración de todas las hermanas en la reflexión del tema, y en la oración. El texto será enviado a las circunscripciones después de las fiestas pascuales.

Tema del Inter-capítulo 

Poniéndonos en sintonía y en continuidad con el tema del 10° Capítulo general, «Creemos y por eso hablamos», y conscientes de la necesidad de ser «almas encendidas de fe» (PP p. 680) para comunicar a todos, «el sublime tesoro de la Palabra revelada» (EG 175), hemos puntualizado así el tema y, nos auguramos, que dará nueva luz a nuestro camino institucional:

CREEMOS Y POR ESO COMUNICAMOS
LA ALEGRÍA DEL EVANGELIO Y LA BELLEZA DEL CARISMA

Un tema que leeremos en la óptica de la expresión alberioniana:

«CUANDO SE TIENE EL FUEGO EN EL CORAZÓN…»[2]

Solo si el anuncio parte del fuego del amor, es fecundo. Para el beato Alberione, la comunicación del Evangelio, de hecho, es la caridad «más sublime» y esencial que puede ofrecer a los hombres y mujeres de cada tiempo y cultura: «Ninguna riqueza mayor que Jesucristo puede darse a este mundo pobre y orgulloso» AD 182).

Este  fuego en el corazón, es la fuerza unificadora, el secreto de nuestra profecía, el fundamento de aquella dimensión “docente”  de la cual, desde los inicios, Don Alberione nos ha exhortado.

Celebrando la Epifanía, la fiesta de la manifestación de la Luz, nos abrimos de par en par a los pueblos con el deseo de hacer a todos, «la caridad de la verdad».

A María, tabernáculo viviente de Dios, confiamos el camino que hoy iniciamos para que sea animado por la alegría, por la acción de gracias por el carisma que brilla en nosotros, cuya belleza nos abre al estupor por las maravillas que el Señor sigue actuando a través de nuestra pobreza.

Con afecto

sor Anna María Parenzan
Superiora general

[1] La comisión está formada por: sor Anna Caiazza y sor M. Lucia Kim (Consejeras generales), sor Annunciata Bestetti (Prov. Italia-Suiza), sor Angela Grant (de Gran Bretaña) y sor Teresa Marcazzan (de África Or.-Nig.-Zambia-Sud Sudán).

[2] FSP46-49 p. 580.